El 4 de febrero es el día elegido a nivel mundial para concientizar sobre cáncer. El objetivo de esta jornada es reducir el número de muertes evitables cada año, dando a conocer y difundiendo cuáles son las acciones que deben encararse para reducir la mortalidad por esta enfermedad.
"Yo soy y voy a" es el lema con el que la organización Día Mundial del Cáncer intenta hacernos tomar conciencia sobre la importancia de nuestro poder para reducir el impacto de la enfermedad en nosotros, en nuestros seres queridos y en el mundo. "Es el momento de hacer un compromiso personal", nos pide la organización desde su web, y para eso necesitamos saber qué es el cáncer y qué podemos hacer al respecto.
Aprovechamos el Día mundial del cáncer para refrescar los conocimientos que tenemos sobre la enfermedad, los métodos para prevenirla y los tratamientos para enfrentarla.
¿Qué es el cáncer?
El cuerpo está compuesto por muchos tipos de células que crecen y se dividen para producir nuevas células que son indispensables para mantener sano el organismo. Algunas veces este proceso ordenado se descontrola y nuevas células se siguen formando cuando el cuerpo no las necesita mientras que otras, ya viejas, no mueren. Es en este proceso cuando comienza a formarse una masa de tejido que se denomina tumor y puede ser benigno o maligno. De estos tumores sólo los malignos implican cáncer.
Informarse y generar conductas saludables es fundamental para prevenir la enfermedad. También el conocimiento es imprescindible para diagnosticar en forma temprana el cáncer y tratarlo. Muchos tumores malignos son curables si se detectan y se tratan a tiempo.
¿Qué podemos hacer para prevenir la enfermedad?
Los autocuidados nos dan la oportunidad de optar por un estilo de vida mucho más saludable. Así es como debemos mantener una alimentación adecuada, incorporar el ejercicio físico como rutina diaria y evitar hábitos perjudiciales como fumar y exponernos al sol incorrectamente. También, en este sentido, la incorporación al calendario obligatorio de vacunas específicas como la del VPH es un recurso muy importante para la prevención.
Otro punto significativo, tal como hemos mencionado, es la detección precoz. En este sentido los exámenes ginecológicos, las mamografías, los análisis específicos y los estudios digestivos permiten ampliar las posibilidades de conocimiento y por lo tanto de curación.
El creciente papel de la tecnología aplicada permite tener mejores estudios y diagnósticos, conocer la enfermedad para seleccionar la estrategia de tratamiento más adecuada y personalizada. Así, se suman mejores medicamentos, más efectivos, menos tóxicos como la inmunoterapia, que consiste en aplicar medicamentos en el cuerpo para “desenmascarar” a las células cancerígenas y que el sistema inmunológico pueda reconocerlas y atacarlas. Dependiendo del caso, estos tratamientos se pueden combinar con otros, como la quimioterapia.
La radioterapia, otra herramienta para el tratamiento del cáncer, es más precisa gracias a los adelantos tecnológicos y las cirugías cada vez son menos agresivas y tienden a conservar la integridad del paciente.
La importancia relevante del trabajo en equipos multidisciplinarios con especialistas clínicos y quirúrgicos, suma la integración de la psico-oncología, el apoyo nutricional específico y los cuidados paliativos para procurar una mejor calidad de vida.
En el Hospital Universitario contamos con los equipos de trabajo necesarios para atender y asesorar ante cualquier inquietud, vacunatorio y equipamiento tecnológico necesarios para prevenir y diagnosticar en forma temprana. Usted puede solicitar su turno con un especialista llamando de lunes a viernes de 8 a 20 hs. al 0810 999 1029.