El "Día Mundial para la Prevención del Abuso Sexual Infantil" se conmemora el 19 de noviembre de cada año con el fin de visibilizar, informar y concientizar sobre este tema que impacta en la vida de las infancias. Desde el Hospital Universitario, en conjunto entre las áreas de Pediatría, Trabajo Social y Comunicación hemos preparado la siguiente síntesis para poder definir términos importantes, establecer cuáles son los indicadores en los distintos niveles de violencia y saber dónde recurrir frente a casos de sospecha

Recientemente fue publicado el manual clínico "Atención integral de la salud ante situaciones de violencia por motivos de género", una herramienta brindada de manera conjunta entre el Ministerio de Salud de la Nación, la Organización Panamericana de la Salud y la Organización Mundial de la Salud. Allí se indica: 

"En los últimos años se ha interpelado la categoría “abuso sexual infantil”. En relación al calificativo “infantil” se señala que oculta y no nombra la responsabilidad de la persona agresora. En cuanto al término “abuso sexual”, si bien persiste en las normativas que lo penalizan, numerosos debates han señalado lo controversial de hablar de abuso en tanto dicho término significa “el uso excesivo o inadecuado de una cosa en prejuicio propio o ajeno”. En este sentido no se usa ni se abusa de niños, niñas ni adolescentes sino que se ejerce violencia.  En línea con esta argumentación, se elige la preposición “contra” y no “hacia”, para visibilizar el sentido de oposición, contrariedad y antagonismo". (página 133)

Hecha esta aclaración, señalamos que cualquier niño, niña o adolescente (NNyA) puede ser víctima de violencia sexual, independientemente de su edad, género, educación y nivel sociocultural. La agresión puede venir de cualquier persona pero una parte importante es ejercida por familiares y conocidos y favorecida por la convivencia o cercanía. Se puede dar de manera repetitiva o por única vez.

Violencia sexual es cualquier acción que implique a niños, niñas o adolescentes en actividades sexuales por parte de una persona que desde una asimetría de poder ejerce coerción, amenazas y abuso de confianza, exista o no contacto físico. La mayoría de las veces hay ausencia de huellas físicas, lo que invisibiliza el hecho. Puede ir desde tocamientos, exposición de órganos sexuales, masturbación frente a NNyA hasta violaciones.

La violencia sexual hacia NNyA puede ser grave, leve o moderada. Para detectarse existen indicadores de certeza y de sospecha tanto físicos como psicológicos. Es importante aclarar que estos indicadores deberán ser considerados en el marco de una evaluación integral por parte de equipos especialistas.

Violencia sexual grave es la que requiere intervención urgente, ya sea por la existencia compromiso físico con necesidad de atención médica, por la presencia de marcado impacto emocional o por ausencia de personas adultas protectoras. Algunos indicadores que nos ayudaran a sospechar son: lesiones, dolor y escozor en genitales; presencia de cuerpos extraños y fluidos en genitales; infecciones urinarias a repetición sin causa orgánica. También es importante atender al relato del NNyA, a presencia de conductas erotizadas, conocimiento de la sexualidad no acorde a la edad evolutiva, juegos sexualizados persistentes e inadecuados; y agresiones sexuales hacia otros niños/as.

Por otra parte, entre los indicadores de violencia moderada encontramos la incontinencia urinaria y fecal, alteraciones del sueño o alimentación, autolesiones, disminución del rendimiento escolar que se instala de manera abrupta o repentina sin otra causa que lo justifique; y regresión a conductas anteriormente superadas.

En cuanto a violencia sexual leve, podrán presentarse cualquiera de los indicadores anteriormente mencionados, la intensidad de la sintomatología dependerá del impacto del hecho en cada NNA.

Grooming, una nueva modalidad de violencia sexual

El grooming también es violencia sexual. Se trata una nueva modalidad de violencia sexual ejercida a través de medios digitales como redes sociales, correos electrónicos, juegos en línea y chats, entre otros. La persona agresora comienza un vínculo de confianza para conseguir material de índole sexual de manera extorsiva. Es importante detectar a tiempo la situación para evitar el contacto por fuera de la virtualidad.

Podemos ayudarte

La violencia sexual es un delito de acción pública. Frente a un caso de sospecha podés llamar al 102 (línea NNyA) para dar aviso anónimo y confidencial; ante situaciones de urgencia llamar al 911.

También podés apoyarte en el equipo de salud que te brindará un espacio interdisciplinario de escucha, contención y asesoramiento. El Hospital Universitario cuenta con servicio de Pediatría, Trabajo Social y Salud Mental, conformado por especialistas que se actualizan constantemente en la temática para brindar un abordaje oportuno e integral.

Fuentes: 

• Manual Clínico Atención integral de la salud ante situaciones de violencia por motivos de género. Herramientas para equipos de salud. OPS, OMS y Ministerio de Salud de Presidencia de la Nación
• Guía de procedimientos y circuitos de actuación en situaciones de maltrato hacia niños niñas y /o adolescentes desde la atención primaria de la salud. Programa Provincial de Maltrato Infantil de Mendoza.
• Cartilla para prevenir y erradicar el Abuso Sexual Infantil. Foro por la Niñez.