31 de Mayo: Día Mundial Sin Tabaco
El tabaquismo constituye un grave problema mundial de salud pública. En América es el principal factor evitable de mortalidad y según la Organización Panamericana de la Salud, OPS, es la segunda causa de muerte en el mundo. Para revertir esta situación, la OPS y los países miembros acordaron trabajar sobre algunas metas básicas: el desestímulo a nuevos fumadores, la protección a los niños de ambientes que incitan a fumar, la creación de programas de apoyo para las personas que quieran dejar de hacerlo y la protección a quienes no fuman de la exposición al humo del tabaco.
En 1988 la Asamblea de la Organización Mundial de la Salud por resolución acordó que el 31 de mayo de cada año se celebre el Día Mundial Sin Tabaco con el propósito de contribuir a crear conciencia y desalentar este consumo en todas sus formas, invitando a los gobiernos y a quienes estén relacionados con el tema a participar activamente en la construcción de sociedades más saludables.
En la última década, la OMS ha declarado la guerra a las llamadas “enfermedades ligadas al estilo de vida”: enfermedades cardíacas y respiratorias crónicas, diabetes y cáncer. Ellas son responsables de 36 millones de muertes anuales, más del 60 por ciento de la tasa de mortalidad global. El consumo de tabaco se ubica –junto al consumo excesivo de alcohol, una dieta no saludable y la inactividad física– entre los principales factores de riesgo de contraer tales enfermedades.
Unos seis millones de personas mueren anualmente como consecuencia de lo que la OMS denomina “la epidemia creciente del consumo de tabaco”. De ellos, unos 600.000 son “fumadores pasivos” y más del 80 por ciento provienen de países de medianos y bajos ingresos, se lee en el “Informe de la OMS sobre la Epidemia Mundial de Tabaquismo 2011”.
El tabaquismo es una de las más frecuentes causas de muertes evitables en el mundo. Ello explica que cada vez más países se preocupen, cada vez más activamente, por cumplir sus compromisos con la OMS en la lucha contra el tabaquismo. Y esto, a su vez, ha reforzado los esfuerzos de la industria tabacalera por minar la aplicación de medidas antitabaco. En respuesta, la OMS ha lanzado este año una campaña mundial contra la “intimidación”: “Alto a las interferencias de la industria tabacalera”. Esa es la consigna para el Día Mundial Sin Tabaco 2012.
El Dr. Carlos Elías, médico neumonólogo del Hospital Universitario, nos comenta que uno de los efectos más nocivos del tabaco es el deterioro cognitivo. Investigadores de varios países europeos han estudiado, durante un periodo de 3 años, los hábitos tabáquicos y las modificaciones en la función cognitiva de un grupo de aproximadamente 10 mil hombres y mujeres sin demencia de 65 o más años. Esta situación podría deberse a que el empleo crónico de tabaco incrementa la posibilidad de aterosclerosis e hipertensión. Esto y otros efectos de los cigarrillos, aumentan el riesgo de pequeños infartos 'silentes' en el cerebro. En el estudio, publicado en 'Neurology', se observó además que cuanto mayor fue el consumo más grave era el deterioro cognitivo en los ex-fumadores.
Además el Dr. Elías nos recomienda tratar de conservar hábitos saludables:
“Hay distintas formas para dejar de fumar y recursos para ayudarle. La familia, amigos y los compañeros de trabajo pueden servir de apoyo, pero el éxito depende de cada uno, y de la voluntad mejorar su calidad de vida y evitar serias complicaciones para su salud. Si ha intentado dejar de fumar y no fue exitoso, no vea esos intentos pasados como fracasos, sino más bien como experiencias de aprendizaje. Podemos ayudarlo en este nuevo intento para la cesación tabáquica.”