Saltar a contenido principal Saltar a navegación principal

La importancia de prevenir y tratar la Hipertensión Arterial

En el día mundial de la Hipertensión Arterial, recordamos conceptos claves sobre sus características, tratamiento y prevención para una mejor calidad de vida evitando enfermedades cardiovasculares.

17 de mayo de 2018, 13:18.

imagen La importancia de prevenir y tratar la Hipertensión Arterial

El corazón es el órgano encargado de bombear la sangre oxigenada a través de las arterias hacia todo el cuerpo. Al avanzar, la sangre ejerce una presión contra las paredes de las arterias, que se mide como presión arterial.

La hipertensión arterial se define por la detección de promedios de la presión arterial sistólica (“máxima”) y/o diastólica (“mínima”) por encima de los límites establecidos como normales para los registros obtenidos en el consultorio. Dicho límite es de 140 mmHg para la sistólica y de 90 mmHg para la diastólica.

La presión arterial sistólica o máxima es la fuerza ejercida por la sangre sobre las arterias cuando el corazón se contrae. La presión arterial diastólica refleja la presión existente en las arterias cuando el corazón está en reposo, entre los latidos cardíacos.

En el 90-95% de los casos de hipertensión arterial, se desconoce la verdadera causa (se denomina “hipertensión esencial”). En el 5-10% restante, la hipertensión puede asociarse a trastornos renales, hipertiroidismo, tumor en la glándula suprarrenal o en la hipófisis, o al embarazo. En estos casos, se habla de “hipertensión secundaria”.

Es fundamental señalar que la hipertensión arterial es una enfermedad controlable, que disminuye la calidad y la expectativa de vida puesto que aumenta el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares. La modificación del estilo de vida y el tratamiento con medicación específica permiten controlar la hipertensión arterial.

Habitualmente no presenta síntomas. Vale aclarar que el sangrado nasal, el dolor de cabeza o las hemorragias conjuntivales no son síntomas de hipertensión.

Entre los principales factores de riesgo se puede numerar:

  • Edad: mayor a 50 años
  • Sexo: las mujeres en la post menopausia aumentan el riesgo de hipertensión
  • Antecedentes familiares
  • Obesidad central o abdominal
  • Sedentarismo
  • Alcoholismo
  • Tabaquismo
  • Estrés
  • Elevada ingesta de sodio (sal)
  • Etnia: afroamericano
  • Algunos anticonceptivos (especialmente, cuando la mujer fuma)

 

Su tratamiento se basa en fármacos y cambios en el estilo de vida

Alimentación con poca sal. Es necesario evitar el consumo de alimentos procesados, embutidos, fiambres, quesos duros; seleccionar alimentos y aguas bajos en sodio; y favorecer el consumo de frutas y verduras como fuente de potasio (que ayuda a controlar la presión arterial). De presentar sobrepeso, se indica una reducción del peso corporal. Abandono del tabaquismo. Actividad física regular acorde a la edad de cada paciente. La recomendación es 30 minutos diarios de actividad física moderada.

El tratamiento farmacológico se realiza con medicamentos antihipertensivos que serán indicados oportunamente por el profesional.

 

¿Cómo prevenir la Hipertensión Arterial?

La alimentación debe ser preferentemente con bajo contenido de sal (seleccionar panes, galletitas, quesos, aguas con menor aporte de sodio) y con alta contribución de potasio (frutas, verduras, legumbres y pescado).

Además es recomendable mantener peso normal, realizar actividad física regularmente y no fumar.

 

Ante cualquier inquietud, no deje de consultar en nuestro servicio de Cardiología. Solicite su turno llamando de lunes a viernes de 8 a 20 al 0810 999 1029

 

Fuente: Servicio de Cardiología Hospital Universitario a través de wikicardio.org.ar

Contenido relacionado