¿Qué es una ola de calor y por qué tenemos que cuidarnos?
Hablamos de una ola de calor cuando se presentan altas temperaturas durante varios días seguidos en un mismo lugar. La ola de calor afecta la salud de bebés, niños y niñas, adultos mayores de 65 años, personas embarazadas, con sobrepeso, a quienes tienen enfermedades de base y a personas que realizan sus actividades al aire libre o en ambientes calientes.
Las principales consecuencias para nuestra salud son: golpe de calor, es decir, el aumento peligroso de la temperatura del cuerpo, y deshidratación, que es la pérdida del líquido que el cuerpo necesita para funcionar. Estos efectos pueden ser muy graves y en algunos casos incluso puede causar muerte.
Recomendaciones durante la ola calor
Los aspectos importantes al momento de protegernos son: la hidratación, la alimentación, la salud de nuestra piel y las actividades que realizamos.
Hidratación. Si estamos en lugares cerrados, como nuestra casa o trabajo, tomemos agua sin esperar a tener sed. Evitemos beber café, gaseosas, aguas saborizadas y jugos en polvo para preparar.
A niños y niñas hay que ofrecerles agua o jugos naturales antes de que pidan. Si estás dando de mamar, dale el pecho a tu bebé más seguido que lo habitual.
Alimentación. Es importante comer frutas y verduras. También debemos servirnos porciones justas para no comer de más.
Cuidados de la piel. Evitemos estar al sol entre las 10 y 16 horas, sobre todo bebés, niños, niñas y personas mayores de 65 años. Cuando estemos al aire libre siempre, debemos usar protector solar.
La ropa que usamos también puede protegernos. Lo ideal es elegir ropa suelta, liviana, de algodón, de colores claros y gorros.
Una recomendación especial en el caso de los bebés es bañarlos más de una vez por día y controlarles el cuello, pecho, axilas, pliegues del codo y la zona del pañal, ya que la transpiración enrojece la piel.
Actividades. No realicemos actividad física fuerte. En caso de sentir mareos o descomposturas, no salgas ya que el calor empeora los síntomas. Los más pequeños deben estar en lugares ventilados y frescos. Por último, si las personas mayores tienen que salir, es mejor que alguien les acompañe.
10 síntomas para prestar atención y consultar con tu médico
- Mucha sed y sensación de boca seca
- Fiebre mayor a 39º C
- Más transpiración que de costumbre
- Piel seca
- Sofocación
- Cansancio
- Mareos o desmayos
- Dolor de estómago y de cabeza
- Falta de apetito
- Náuseas o vómitos
Si necesitás, acercate a nuestra Unidad Demanda Espontánea de Adultos de lunes a viernes de 8 a 19.30, atención por orden de llegada con cupos limitados.
Fuente: Ministerio de Salud de la Nación