Como lo hizo desde el inicio de la pandemia por COVID-19, la Universidad Nacional de Cuyo refuerza su compromiso con el sistema de salud provincial y con toda la comunidad mendocina, en general, y vuelve a poner a disposición la Sala de Internación del Hospital Universitario.
El rector Daniel Pizzi, acompañado por la vicedecana de la Facultad de Educación, Ximena Erice, les confirmó en una reunión a la ministra de Salud Ana María Nadal y al ministro de Gobierno y Trabajo, Víctor Ibáñez, que se preparan nuevamente para recibir pacientes, ante la posible llegada de una segunda ola.
El Comité de Emergencia de la UNCUYO ya lo había anunciado a fines de 2020 -decisión ratificada por el Consejo Superior- cuando se suspendió la atención en la sala denominada “María Victoria Gómez de Erice” hasta que volviera a existir una demanda real, ya que desde principios de noviembre no volvió a recibir pacientes. Esa suspensión permitió que la Universidad evitara desembolsar cerca de $13 millones en los meses de enero, febrero y marzo de 2021. Pero durante los meses críticos de la pandemia, el Hospital atendió y dio de alta a unas 500 personas.
Acondicionada en tiempo récord a raíz de las necesidades que suscitó la pandemia el año pasado, la sala cuenta con 15 habitaciones y 29 camas de mediana complejidad. Si bien no existe fecha de reapertura, la Universidad y el equipo directivo del Hospital ya trabajan en la conformación del equipo de personal que estará a cargo, integrado por muchos de los profesionales que habían sido contratados en la primera etapa de su funcionamiento.
“El Hospital está a entera disposición y ya estamos trabajando para que pueda estar a la altura de las circunstancias otra vez, apenas lo necesiten. Mientras tanto, seguimos trabajando en cumplir con su principal objetivo: ser un hospital escuela”, aseguró el Rector, reafirmando el compromiso de la UNCUYO de rehabilitar el área COVID si vuelve a ser necesario, pero sin dejar de atender a los proyectos -en obras y planificación- que el nosocomio tiene a corto y largo plazo.
“Tenemos todo para que sea por un lado formador de estudiantes, pero también para avanzar en investigación, aprovechando que tenemos investigadores de primera línea y reconocidos a nivel internacional”, agregó Pizzi.
La ministra de Salud, por su parte, y luego de recorrer con el ministro Ibáñez las instalaciones que se usarán nuevamente, avaló la decisión de la Universidad y remarcó lo importante que será que reciban -como se hizo antes y cuando surja la necesidad- derivaciones de pacientes por parte de algunas obras sociales, como OSEP. Esto, atendiendo a un leve pero inminente aumento de casos, que podría ser mayor, como está previsto por la época y el contexto mundial.
Nadal destacó, además, la importancia del aporte de la UNCUYO a la lucha contra el COVID-19, también a través de estudiantes, voluntarios y profesionales, con el aporte como ejemplo de Ciencias Médicas que hoy está inoculando activamente a través del Vacunatorio inaugurado recientemente.
En el encuentro estuvieron presentes, el secretario de Extensión y Vinculación de la UNCUYO y también coordinador del Comité de Emergencia, Mauricio González; y el director general del Hospital, Conrado Risso Patrón.
Quien dirige hoy el nosocomio hizo alusión al esfuerzo en materia presupuestaria que realiza la Universidad para solventar este tipo de servicios y el compromiso que se debe tener para que las contrataciones se den en forma ordenada, garantizando las condiciones laborales mínimas del personal.
También participaron, el director asistencial del HU, Gustavo Cívico; el director académico, Gonzalo Nalda y el director de Gestión Administrativa, Walter Frajberg.
